Saludos de nuevo queridos y muy estimados lectores. Estoy otra vez por aquí, en esta ocasión con una publicación un cuanto técnica pero que considero muy importante, que nos ayudará a conocer todo lo necesario para que el dinero que generan nuestras Composiciones, por una parte, y el dinero que generan nuestras Grabaciones, por otra, termine en nuestro bolsillo. Antes de comenzar es importante recordarles que, precisamente, nuestras composiciones y nuestras grabaciones no son la misma cosa; de hecho, son dos propiedades intelectuales separadas que generan regalías separadas. De esto ya hemos hablado en publicaciones anteriores y es necesario que lo comprendas muy bien, por lo que te invito a revisarlas aquí mismo, en el menú del blog.
Habiendo dicho lo anterior, vayamos ahora con el contenido central de esta publicación:
CAE/IPI
Para comenzar quiero hablarles del código CAE/IPI, en el que sus siglas significan Composer, Author and Publisher e Interested Parties Information. Este código es un número internacional único de entre 9 y 11 dígitos que te identificará como compositor de obras musicales; será como tu ID internacional de autor y compositor. Pero quizá te estarás preguntando en este momento: ¿cómo consigo este código, cuánto cuesta tramitarlo, y principalmente, para qué me sirve?
Primero que nada, este código te lo otorgará la PRO (performing rights organization) a la que decidas afiliarte, es decir, la sociedad de compositores de tu país (o de algún otro). Recuerda que las PROs se especializan en recolectar las Regalías de Ejecución Pública generadas por tu Composición, de lo cual hemos también hablado a fondo en publicaciones pasadas. La mayoría de los países del mundo cuentan únicamente con una PRO, pero algunos, como los Estados Unidos, tienen más de una (BMI, ASCAP, SESAC) y tu decidirás a cuál de ellas afiliarte; de hecho, es posible afiliarte a alguna de las PROs de Estados Unidos desde tu país, aún sin ser ciudadano o residente americano. En una próxima publicación les hablaré de las ventajas y desventajas que puede tener el registrarte con una sociedad de compositores de Estados Unidos o incluso de cualquier otro país que no sea el tuyo.
Volviendo al tema, es necesario que te registres en alguna de estas PROs para que ellos te asignen tu número IPI internacional, el cual será tu ID única y permanente. Si en algún momento decides cambiarte a otra PRO, puedes conservar el mismo IPI que ya tenías, no te preocupes. Una de las principales razones de la existencia de este número, es que si hubiera otro compositor con tu mismo nombre y apellido en cualquier otra parte del mundo, este código los diferenciaría por completo y las regalías le llegarían a quien le tienen que llegar, sin confusiones, ni más ni menos.
Otra cuestión importante que quiero aclararte, es que este número CAE/IPI no es el mismo que el número de Socio que te asigna tu PRO; podríamos decir que el número de socio que te asigna tu PRO es algo para su propio control interno, mientras que tu número de CAE/IPI es tu identificación internacional como compositor de canciones y obras musicales en general.
Obtener este número no tiene ningún costo y recuerda que lo podrás tramitar cuando te afilies a la sociedad de compositores de tu país o de tu elección. Este código se utiliza principalmente para poder relacionar de manera precisa las regalías que generan tus composiciones en todo el mundo a dicho número, para que puedas cobrar adecuadamente lo que te corresponde. Si tienes dudas en cómo afiliarte a una PRO (sociedad de compositores), puedes visitar nuestro Centro de Soluciones Legales para el Músico, donde nos ponemos a tus órdenes: https://dacapo.com.mx/dcmusic/
ISWC
El siguiente código del que quiero hablarte es el que se conoce como International Standard Musical Work Code, el cual es un número de referencia único, permanente y reconocido internacionalmente para la identificación de tus composiciones. Este número es de vital importancia para ti, ya que diferenciará tu composición de cualquier otra en el mundo, sin importar que lleven el mismo título. Nuevamente, es muy importante que entendamos que este número está asociado a tu composición y no a las grabaciones que se hacen de la composición, de lo cual también hablaremos más adelante en esta publicación.
El organismo que te asignará estos números será también tu sociedad de compositores (PRO) con la que estés registrado. Cuando te inscribas en una PRO (BMI, ASCAP, SACM, SAYCO, etc.), la mayoría de ellas te darán un usuario y un password para acceder a tu panel de control, donde podrás dar de alta tus composiciones, y es aquí donde te proporcionarán el código ISWC para cada una de tus obras.
Pero para ser más precisos, este código ISWC no lo expide la PRO de tu país realmente, sino un organismo internacional llamado CISAC (Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores); sin embargo, para fines prácticos, lo que tienes que hacer es inscribirte en una PRO, ya que es a través de ellos como conseguirás los códigos para cada una de tus composiciones. También existe la posibilidad de contactar directamente a CISAC para solicitarles códigos para tus composiciones, pero te recomiendo que no te saltes etapas y te registres con la PRO de tu preferencia, para a través de ellos solicitar tus códigos.
ISRC
Como contraparte del código anterior, este código conocido como International Standard Recording Code, es el número que identificará a un fonograma específico, conocidos también como grabación, producción, master recording, audio y algunos otros nombres. Este número hará posible rastrear las grabaciones y saber cuántas copias se han vendido y/o “estrimeado”.
Recordemos siempre que una Grabación es una propiedad intelectual separada de la
Composición, pero creo que sería más fácil explicar esto con un ejemplo:
Supongamos que yo acabo de componer una canción con mi guitarra, a la cual llamé “Ojos del Viento”. Esta canción se la muestro a una amiga mía que es cantante independiente y que está por lanzar su nuevo material discográfico. A mi amiga, a quien llamaremos Karen, le gusta mucho mi composición y decide grabarla en su álbum. Karen lanzará este álbum al mercado por medio de la agregadora digital CD Baby, y es precisamente CD Baby quien le proporcionará a Karen el número ISRC para su grabación. Cuando Karen está haciendo su cuenta en CD Baby y subiendo los datos de su grabación, es ahí cuando CD Baby le asigna un número ISRC específico a dicha grabación.
Un par de meses después, otro amigo mío, a quien llamaremos Ricardo, escucha la grabación de Karen y me pregunta si la composición es mía, a lo que le respondo que sí. Ricardo decide entonces hacer un cover de mi canción y grabarla también en su próximo álbum. Cuando la grabación está lista, Ricardo utiliza un agregador diferente como DistroKid para distribuir su grabación. Ahora, será DistroKid quien asigne un número ISRC para la grabación que hizo Ricardo. Por lo tanto, Karen es dueña de su grabación y tiene un código ISRC específico, y Ricardo es dueño también de su grabación, la cual tiene otro código ISRC distinto, ya que son propiedades intelectuales diferentes, producidas y creadas por personas diferentes.
Ambos códigos ISRC, el de Karen y el de Ricardo, estarán ligados al código ISWC de mi Composición, la cual como ya sabemos, es otra propiedad intelectual. Por lo tanto, cada vez que Karen o Ricardo vendan una copia de sus Álbumes, me corresponderán regalías como compositor. Esa es la forma en que se relacionarán los códigos ISRC con el código ISWC de mi composición. Una misma composición puede tener asociados muchos fonogramas diferentes, o lo que es lo mismo, de una misma composición (ISWC) se pueden generar muchas grabaciones diferentes (ISRC).
Los códigos ISRC serán proporcionados por la agregadora que escojas para subir tu música a todas las plataformas (CD Baby, TuneCore, DistroKid, Amuse, etc.). Pero de igual manera que los códigos ISWC son distribuidos realmente por la CISAC y no por las PROs, los códigos ISRC son distribuidos por la IFPI (International Federation of the Phonographic Industry) y no por las agregadoras; por lo que en un momento dado pudieras solicitar estos códigos directamente a la IFPI, aunque mi recomendación es que lo hagas por medio de tu agregadora, o si fuera el caso, a través de tu compañía discográfica (record label).
Es por medio de estos códigos ISRC que tu agregadora (como CD Baby) te podrá hacer el pago de las reproducciones de tus grabaciones.
UPC
Finalmente, el Universal Product Code es un código para identificar un producto específico, como puede ser un Álbum, un EP o un Single (o incluso cualquier otro producto como un televisor, un pantalón, una libreta, etc.). Es fácil confundir este código con el ISRC, pero son conceptos diferentes:
Por una parte el ISRC identifica una grabación específica (su sonido) sin importar el formato en el que se coloque; por otra parte, los códigos UPC identifican productos específicos, como pudieran ser viniles, CDs, Álbums completos, Singles, etcétera. Este código también es conocido comunmente como “Código de Barras” y puede servir para vender tus productos en tiendas físicas y tiendas en-línea, y para rastrear cuántas unidades se han vendido de cada producto. De igual forma que el código ISRC, los códigos UPC puedes solicitarlos a tu agregadora digital.
Espero que esta información te sea de utilidad. Si necesitas ayuda con algún tipo de registro o inscripción a estas sociedades recuerda que DC Music – Centro de Servicios Legales para el Músico te podemos ayudar. https://dacapo.com.mx/dcmusic/
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Jorge Rocha
Musician/Producer/Songwriter
Descifrando el mundo de la música 